Minas Gerais acaba de recibir la mayor planta de producción de energía solar en operación en Brasil y una de las más grandes de América Latina. El Complejo Solar fue inaugurado en Janaúba, en el norte del estado, cerca del distrito de Quem-Quem, con una capacidad instalada de 1,2 GWp. Esto significa que el proyecto es capaz de generar electricidad suficiente para abastecer a un millón de hogares. La planta es un hito para el sector energético brasileño y representa un paso importante hacia la transición hacia fuentes de energía limpias y renovables. Con la inauguración del Complejo Solar, Minas Gerais se consolida como un importante polo de producción de energía solar en el país.
El mayor complejo de energía solar de Brasil pertenece a la empresa Elera Renováveis, con una inversión privada de R$ 4 mil millones y forma parte del grupo canadiense Gestión de activos de Brookfield. Con 20 parques solares y una capacidad instalada de 1,2 GWp, suficiente para abastecer a un millón de hogares, este proyecto representa un importante avance en la transición del país hacia fuentes de energía limpias y renovables. La iniciativa privada juega un papel fundamental en este proceso, invirtiendo en tecnologías sostenibles y promoviendo el desarrollo económico y social de regiones enteras. El complejo tiene 2,2 millones de módulos fotovoltaicos instalados en 20 sitios diferentes, y Minas Gerais lidera el ranking de generación solar distribuida con 3,06 gigavatios (GW) de potencia instalada.
Las obras del Complejo de Janaúba generaron cerca de 11 mil empleos directos e indirectos. Además, se estima que gracias a esta iniciativa se reducirá la emisión de aproximadamente 4,3 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera. La ciudad de Janaúba, ubicada en el norte de Minas Gerais, es conocida por sus fuertes niveles de irradiación y poca nubosidad, lo que la convierte en una de las mejores regiones para generar energía solar del país. Con el Complejo Solar, la ciudad se consolida como un importante centro de producción de energía limpia y renovable, impulsando el desarrollo económico y social de la región.
Esta gran estructura es responsable de la producción de electricidad limpia y renovable, capaz de satisfacer la demanda energética de un millón de hogares. El complejo es un hito importante en el sector energético brasileño y representa un gran paso hacia la sustentabilidad y la reducción de emisiones de gases contaminantes.