En los últimos años, Brasil ha sido testigo de un crecimiento significativo en la adopción de sistemas de energía solar conectados a la red. Estos sistemas, que se conectan a la red eléctrica convencional, se han convertido en una opción cada vez más atractiva para hogares y empresas que buscan soluciones sostenibles y rentables. Con la disminución del costo de los paneles solares y el aumento de la conciencia ambiental, más personas eligen generar su propia electricidad a partir de la luz solar. Además de reducir la factura de la luz, los sistemas on-grid permiten inyectar a la red los excedentes de energía producidos, generando créditos de energía utilizable cuando la demanda supera la producción solar. Esta integración entre la generación solar y la red eléctrica convencional promueve una transición gradual hacia un sistema energético más limpio y sostenible, beneficiando a los consumidores y al medio ambiente.
Sistemas fuera de la red
La búsqueda de autonomía energética impulsa el crecimiento de los sistemas de energía solar fuera de la red en Brasil. Estos sistemas, que operan independientemente de la red eléctrica convencional, demuestran ser una solución efectiva para áreas rurales remotas o áreas con infraestructura eléctrica limitada. Con la instalación de paneles solares fotovoltaicos y sistemas de almacenamiento de energía, como las baterías, los consumidores pueden generar y almacenar electricidad para uso continuo, incluso en épocas de ausencia de luz solar o cortes de energía. Esta independencia energética aporta importantes beneficios, como la garantía del suministro energético en situaciones de emergencia, la reducción de costes con los combustibles fósiles y una mayor sostenibilidad medioambiental. Los sistemas de energía solar fuera de la red representan no solo una solución práctica, sino también una forma de empoderar a los consumidores, permitiéndoles tomar el control de su propia generación de energía y contribuir a un futuro energético más resistente y sostenible.
Diferencias y ventajas de los sistemas On-Grid y Off-Grid
Los sistemas conectados a la red y fuera de la red son dos enfoques distintos para el uso de la energía solar. Exploremos cada uno de ellos:
Sistemas On-Grid (Conectados a la red eléctrica)
Los sistemas en red están conectados a la red eléctrica convencional. Consisten en paneles solares fotovoltaicos instalados en viviendas, comercios u otros edificios, que generan electricidad a partir de la luz solar. Esta electricidad generada se inyecta luego en el
red eléctrica, permitiendo el consumo tanto de la propia instalación solar como de otros consumidores conectados a la misma red.
Ventajas de los sistemas en red
- La electricidad generada puede compartirse con la red, lo que permite la compensación energética y reduce la factura de la luz.
- No es necesario almacenar energía, ya que la red eléctrica actúa como un “almacenamiento virtual”.
- Es una opción más sencilla y económica, ya que no requiere baterías ni sistemas de almacenamiento de energía.
Sistemas Off-Grid (Desconectados de la red eléctrica)
Los sistemas aislados son independientes de la red eléctrica convencional. Están diseñados para proporcionar electricidad autónoma en lugares remotos, rurales o donde no hay acceso a la red eléctrica. Estos sistemas están compuestos por paneles solares fotovoltaicos, baterías de almacenamiento de energía y un sistema de control de carga.
Ventajas de los sistemas aislados
- Permiten la autonomía energética en zonas aisladas o en regiones sin infraestructura eléctrica.
- Pueden suministrar electricidad de forma continua, incluso durante cortes de energía o apagones.
- Ofrecen flexibilidad en la elección del lugar de instalación, no dependiendo de la disponibilidad de la red eléctrica.
Es importante tener en cuenta que los sistemas fuera de la red requieren un dimensionamiento cuidadoso para satisfacer las necesidades de energía del sitio. La energía generada por los paneles solares se almacena en baterías para ser utilizada cuando no hay suficiente sol. Además, estos sistemas suelen implicar una mayor inversión inicial debido a la necesidad de acumuladores y otros componentes de almacenamiento de energía.
Tanto los sistemas conectados a la red como los aislados tienen sus aplicaciones específicas, y la elección entre ellos depende de las necesidades individuales, la disponibilidad de la red eléctrica y la ubicación del proyecto. Ambos enfoques contribuyen a la expansión de la energía solar como fuente de electricidad limpia y sostenible.
Créditos para el Sistema On-Grid
En el sistema de energía solar on-grid, la compensación de energía es uno de los principales beneficios para los consumidores. Este mecanismo, también conocido como net metering, permite inyectar a la red eléctrica los excedentes de electricidad generados por los paneles solares y convertirlos en créditos de energía. Estos créditos se pueden utilizar en momentos en que la producción solar es insuficiente, como por la noche o en días nublados, lo que permite a los consumidores reducir significativamente los costos de electricidad. Además, los créditos se pueden acumular a lo largo del tiempo, permitiendo que la energía sobrante producida en verano, por ejemplo, se utilice en los meses de menor generación solar. Este mecanismo de compensación energética fomenta la adopción de la energía solar, favoreciendo un mejor equilibrio entre oferta y demanda y contribuyendo a la transición hacia un sistema energético más sostenible y eficiente.
La energía fotovoltaica, anteriormente regulada por la Resolución Normativa N° 482/2012 de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (ANEEL), sufrió una importante actualización a partir de 2022. El nuevo marco regulatorio está establecido por la Ley 14.300/2022, que redefine las reglas y establece un nuevo panorama para la operación de la energía solar en Brasil. Esta nueva legislación tiene como objetivo promover un entorno más favorable para el crecimiento y desarrollo de la generación distribuida, incluida la energía solar fotovoltaica.
La Ley 14.300/2022 trae cambios importantes al sector, abordando temas como la ampliación de la capacidad de generación, la simplificación de los procesos de conexión a la red, la definición de nuevas tarifas y mecanismos de compensación de energía, así como incentivos para la instalación de sistemas fotovoltaicos en diferentes tipos de consumidores, tales como viviendas, comercios, industrias y el sector rural.
Con esta nueva legislación se espera una mayor democratización de la energía solar en Brasil y de los sistemas on-grid y off-grid, incentivando a más personas y empresas a adoptar sistemas fotovoltaicos y contribuyendo a la diversificación de la matriz energética del país. Esta transición a un marco regulatorio actualizado e integral es fundamental para impulsar aún más el crecimiento sostenible de la energía solar en Brasil, fortaleciendo su posición como una fuente de energía eléctrica limpia, renovable y rentable.